Porretas – Auditorio Pilar García Peña (Fiestas de Hortaleza – Madrid) (Crónica)
LOS CLÁSICOS DE HORTALEZA
Otro año más llegaron las fiestas de Hortaleza, y para la ocasión el cartel volvió a contar con la presencia de la banda más emblemática del barrio, los Porretas. Presencia que empieza a ser muy recurrente después de muchos años de “olvido”.
No defraudaron, y es que no hay nada mejor que tocar en casa ante su público, no solo de Hortaleza, si no de cualquier punto de Madrid que acudieron a la cita.
Acceder al recinto fue más costoso de lo habitual debido a la fuerte presencia policial y a las consiguientes medidas de seguridad por los motivos que todos sabemos, y además por la coincidencia de varios eventos en la capital, como la final de la Copa del Rey de fútbol.
Pasaban pocos minutos de las once cuando sonó la famosa canción de la película La Vida de Brian y los músicos fueron tomando posición en el escenario ante un auditorio lleno hasta la bandera para arrancar con “Hortaleza” y seguir sin pausa con “Jodido futuro”, “Si nos dejáis” y “Joder que cruz”, las cuales fueron muy bien acogidas por el público, presagiando una gran noche de Rock and Roll.
Con el himno “Vive y deja vivir” continuaron para dar paso a la primera del Clásicos II, “Soy un truhán soy un señor” y enlazarla con dos de sus últimos trabajos: “El gran engaño” y “Mi abuelo Amadeo”, para volver a lo más reciente con “La chica de ayer” y “Resistiré”, y entre ellas el rescatado “Última generación”.
No faltó el recuerdo a Rober, con reivindicación incluida, y es que no sabemos cómo tanto les cuesta a los dirigentes dedicar una calle a una persona y a un grupo que ha llevado el nombre del barrio por bandera, y esa canción tan unida a Rober fue la emotiva “Y aún arde Madrid”.
Turno para “Insurrección”, un tema que defienden tan bien que ojalá permanezca en su repertorio durante mucho tiempo. “Dos pulgas en un perro” dio paso a “El deudor del Condado de Hortaleza” que no podía faltar, y que fue muy coreada por todo el Auditorio.
Vuelta con otro tema de su último trabajo, “Ay que gustito pa mis orejas”, la ya habitual “En mi barrio”, con mucho más emotividad cuando se toca precisamente en su barrio, para enfrentarnos a la parte final del concierto con “El abuelo fue picaor”, “Haciendo el ganso” y “La del fútbol”, abandonando el escenario para volver y ponerlo todo patas arriba con los bises: “Si Lo sé me meo”, la coreada “Marihuana”, y cerrar con “Porretas” con el toque final de “La de Benny Hill”.
La banda estuvo genial, el sonido perfecto, y se consiguió que tanto el grupo como el público pasaran cerca de dos horas de diversión y de rock and roll con un setlist muy bien elegido para la ocasión; y es que los “Porretas” nunca fallan… y menos en casa.
5
4.5